jueves, enero 5

VISITA DEL DIRECTOR GENERAL DE LA POLICÍA A LA SEDE SINDICAL

 
El director general de la Policía visitó ayer, por segunda vez, la sede del SUP. En la ocasión anterior lo hizo siendo portavoz del PP en la Comisión de Interior del Congreso de los Diputados. Por espacio de treinta minutos mantuvimos una reunión en la que estuvieron presentes ocho miembros de la dirección del sindicato. El director general estuvo acompañado por su jefe de Gabinete. En el salón de actos cedimos la presidencia de la mesa de reuniones plenarias al director general como deferencia a su visita, y a su derecha estuvo su acompañante (era el lugar que correspondía al secretario general del SUP pero no vamos a ser quisquillosos con el protocolo en una visita informal).

Durante esos 30 minutos el director general habló prácticamente 28. Aunque la reunión fue informal podemos decir sin faltar a la debida reserva que el director general se refirió a diversos asuntos y entre ellos a los siguientes:

a)      Ley de Personal. Quiere reabrir la negociación sobre esta norma que quedó sin aprobar en el Congreso de los Diputados. El SUP va a mantener las enmiendas que hicimos  durante los últimos años y no aceptaremos que se produzca ningún retroceso en los avances acordados en el texto que fue aprobado en el Consejo de Policía.

b)     Manifestó su decisión de convocar el Consejo de Policía con arreglo a la periodicidad establecida en su reglamento de funcionamiento (cada dos meses), y su intención de convocar un pleno lo antes posible, y que sea presidido por el ministro del Interior. Le recordamos que no asistimos al Consejo de Policía desde junio y que hemos dicho que, con las mismas personas en la Junta de Gobierno, posiblemente no iríamos (hay en especial tres personas cuya salida de la Junta facilitarían que podamos ir a esa reunión). Como quiera que manifestó que puede haber cierto problema de calendario entre la convocatoria del Consejo y los cambios en la Junta de Gobierno que el SUP demanda, señalamos que llegada la convocatoria decidiríamos si acudir o no al Consejo en función de cómo marche el “aterrizaje” del director, secretario de Estado y ministro en la actividad de la Policía.

c)      Planteó que su intención es cumplir escrupulosamente las sentencias judiciales, señalando que tenía una de vencimiento inmediato; fue corregido en el sentido de que las sentencias admiten recurso, que contra esa en cuestión cabe recurso, y  que con ello ganaría al menos un mes de tiempo para tomar una decisión que no perjudique a nadie (básicamente a miembros de la escala superior). Señaló su jefe de Gabinete a instancias del director que en principio barajan como unos 100 puestos de trabajo exclusivos para comisarios principales, 89 de adscripción indistinta, y unos 200 de comisarios. Expusimos que la posición del SUP al respecto es que en la escala superior haya 50% comisarios y 50% principales, y que cuando un comisario sea nombrado para un puesto de trabajo de comisario principal ese nombramiento conlleve el ascenso. Un sistema similar al ascenso a generales en la Guardia Civil y el ejército y que cumple los requisitos constitucionales de mérito, capacidad y antigüedad. El actual de ascenso a comisario principal cumple exclusivamente el de antigüedad. En esto el director general está equivocado y quería cometer un error y además cometerlo con urgencia. Veremos qué hace al final.

Es evidente que en cuanto haga los primeros nombramientos se caerá esa coletilla de la “politización” de que se acusa a algunos mandos actuales, porque inevitablemente ascenderá a mandos de su confianza que no por ello son menos “politizados” que los que eran de confianza del gobierno anterior. Lo que debería hacer es nombrar mandos competentes y profesionales, que no cumplan cualquier orden política por ilegal que sea (como ha ocurrido en el pasado profusamente), y que no asciendan solo los afines políticamente al partido del Gobierno. Y eso tenemos que verlo.

d)     El director general nos solicitó propuestas por escrito sobre cómo regular la concesión de recompensas profesionales, que insistió pretende que se concedan con criterios objetivos. Ya remitimos hace año y medio un documento y posiblemente lo reenviemos al nuevo director, pero será después de mantener una reunión donde él pueda profundizar en las líneas que esbozó en esta informal de ayer, y además, y no menos importante, escuchar los planteamientos del SUP. Quizás por sus cuatro años anteriores en la oposición, en la que le exponíamos asuntos y él atendía a su criterio político para decir o no, proponer o no, tuvimos ayer la impresión de que el director general parece tener claro lo que quiere hacer, (y coincidimos con él en algunos aspectos como el rigor y sometimiento a la ley de la actividad policial, la competencia profesional de los nuevos cargos que se nombren y la transparencia), pero los sindicatos en la Policía, al menos el SUP, propone, negocia, participa, y está de acuerdo o no con lo que se hace, y no nos limitamos a escuchar buenas intenciones como meros invitados de piedra o florero de adorno en el escenario.

e)     Señaló que las circunstancias económicas obligarán a llevar a cabo una gestión austera; le demostramos nuestra voluntad de no poner zancadillas facilitándole una información que, utilizada dentro de unos meses, podía ser muy perjudicial para su tarea en la dirección general, dando orden inmediata a su jefe de Gabinete para que corrigiera esa cuestión (Pedro Agudo estaba con una “tableta” tomando nota de algunas cuestiones).

f)       Se refirió a la regulación de la actividad sindical y a la forma de encauzar la misma. En este asunto también le facilitamos alguna información que puede ser útil para evitar problemas en el futuro. (ésta, la anterior, la de los plazos legales y alguna relacionada con la actividad sindical, en dos minutos que hablamos, fueron informaciones que pueden ayudar al director; veremos si  escucha razones o se quiere equivocar).

Esto es lo que podemos contar de esta reunión. Desde el jueves pasado hemos hablado con el director general telefónicamente dos veces, hemos estado en sus dos actos (toma de posesión y presentación al CNP) y lo recibimos ayer en la sede; ahora toca ponerse a trabajar. Esperamos una próxima reunión donde él profundice en los asuntos que señaló superficialmente en esta reunión de ayer, sus estrategias, objetivos y plazos, y nosotros plantearemos nuestra visión del funcionamiento del CNP con sus virtudes y defectos. Valoramos el gesto de venir a las sedes sindicales estando tan atareado recibiendo a mandos policiales como estuvo ayer, pero es llegado el momento de pasar de las buenas palabras a lo concreto.

Madrid, 5 de enero de 2012.

SECRETARÍA GENERAL