martes, mayo 15


32 años después de sus muertes no conocemos a sus asesinos

 Eran las 9,30 horas del 15 de mayo de 1980. Tres policías nacionales, José Manuel Rodríguez Fontana, Dionisio Villadangos Calvo y Jesús Holgado Sabio prestaban servicio en la comisaría de San Sebastián. Salieron a tomar café al bar Majusti, a unos 500 metros de la comisaría. Se situaron al fondo de la barra.


Tres individuos a cara descubierta entraron en el bar y comenzaron a disparar sobre ellos. José Manuel Rodríguez Fontana intentó sacar el arma. Los asesinos escaparon en un coche Renault 7, matrícula SS-0737-H, robado previamente amenazando con un arma a su dueño al que dejaron atado a un árbol en el mote Aza.

Dado que no era habitual que los compañeros visitaran dicho bar, se supone que los asesinos los siguieron desde su salida de la comisaría.

Los tres solteros, Villadangos tenía 24 años y era natural de Villasola (León); murió en el centro hospitalario al que fue trasladado.

Rodríguez era natural de Almería y tenía 24 años.

Holgado era natural de Carratraca (Málaga), tenía 27 años y murió tras ser intervenido en el hospital.

En el momento del crimen había 17 personas en el bar.

Seguimos sin saber quiénes fueron sus asesinos. Los cómplices son todos los que jalearon a ETA y los que siguen ahora demandando beneficios para sus presos y la humillación de las víctimas y sus familias.

Honor en nuestra memoria a quiénes murieron cumpliendo con su deber defendiendo la libertad y la Constitución.

Madrid, 15 de mayo de 2012

José Manuel Sánchez Fornet