1/. ACUERDOS. Gobierno, patronal y
sindicatos acuerdan extender los ERTEs hasta septiembre. Gobierno y PP pactan
el decreto de “nueva normalidad” ante el enfado de Bildu y ERC. Dos buenas
noticias. Gobierno y PP tienen los datos. En la última crisis económica que
comenzó en 2008 pasamos de 5 millones de parados, personas desesperadas, suicidios,
desahucios, miseria… ¿Saben cuánto bajó el PIB de España en el peor trimestre
de esa crisis, el primero de 2009? El 2,6%. ¿Saben cuánto ha bajado este primer
trimestre de 2020? El 5,5%. ¿Saben cuánto calculan que bajará el próximo
trimestre? Más del 7%. Estamos cayendo a un precipicio cuyo fondo no conocemos
ni la dureza del golpe. Si no salimos rápido peligra la (mal llamada) democracia.
La gente con hambre se enfrenta a la Policía por su familia. Y hacen bien. El
Estado debe impedir que se llegue a eso con medidas económicas. De ahí la
necesidad de acuerdos Gobierno-PP para obtener las mejores condiciones de la
UE.
2/. PATRIA. En España hace dos generaciones
que no se enseña historia de España. Muchas personas de estas generaciones
tienen una idea difusa de los Reyes Católicos, o de Colón, no saben quién era
Juan de Oñate, Blas de Lezo, Fray Junipero Serra, la batalla de las Navas de
Tolosa o la historia de los Tercios españoles que conquistaron medio mundo. Los
ignorantes confunden un asunto de violencia
policial con racismo. Los
ignorantes PUT (pensamiento único talibán) que suelen ser progres presuntos de
izquierda, pero en realidad son ignorantes fascistas bolcheviques, alientan el
derribo y la pintada de estatuas de protagonistas de la historia. En Estados
Unidos mueren 10 veces más negros a manos de negros que de blancos. Los negros
asesinan 10 veces más a blancos que blancos a negros. La ignorancia con dosis
de fanatismo acaba con la civilización y nos traslada a la barbarie. La
patria es allí donde un individuo se
siente ligado por vínculos de diversa índole, afectivos, culturales, históricos
o el lugar donde se nace. Si la educación destruye esos vínculos, adiós Patria,
adiós nación, adiós Estado.
3/. NACIÓN. Una nación se sustenta sobre la
memoria común. Aquí ya no existe. En 20, 30 años seremos estados confederados,
la justicia territorial estará controlada por los corruptos y millones de
personas estarán aisladas y sometidas. Ese es el futuro si no se cambia el
rumbo. Hay que reformar la Constitución. Fijar que los derechos sociales
(sanidad, educación, pensiones, dependencia, Ingreso mínimo vital…) con sus
requisitos y controles, son derechos de la ciudadanía. Fijar que el castellano,
la lengua común, será vehicular en educación en todo el territorio de la nación
y allí donde haya otras lenguas españolas propias del territorio, se impartirá
al 50% (Cataluña, País Vasco, Galicia). La nación es política (soberanía de
todos sus nacionales), multicultural, cívica, una comunidad de ciudadanos
que anteponen el bien común a sus intereses individuales naciendo así un contrato social entre todos ellos, como
depositarios de la soberanía, del que surgirá un Estado regido por
la voluntad general. Una nación tiene nombre
propio, asociada a un territorio que posee mitos comunes de antepasados que
comparte una memoria histórica, uno o más elementos de una cultura compartida y
un cierto grado de solidaridad. Una materia troncal de historia será
obligatoria en todo el territorio. Solo así podrá sobrevivir la nación.
4/. ESTADO. El Estado es la unidad política básica de la sociedad
internacional. Es una
organización política constituida por un conjunto de instituciones burocráticas
estables, a través de las cuales ejerce el monopolio del uso de la fuerza (soberanía) aplicada a una población dentro de unos
límites territoriales establecidos. Todo Estado está dotado de territorio,
población y soberanía. Es
la estructura administrativa que cobra
impuestos, paga a militares, policías, sanitarios, pensiones, profesores… y hay
distintas fórmulas en el mundo. España es una monarquía parlamentaria, pero
podría ser una república o cualquier otro que se decida por la mayoría
soberana: el pueblo español. Desde los orígenes de la mal llamada democracia
(no lo es, es una partidocracia; los diputados no obedecen a quienes los votan
sino a los jefes de sus partidos que los han colocado en las listas) los
partidos nacionalistas están tratando de romper el Estado y quedarse con su trozo
del pastel. No piensan en la ciudadanía sino en ellos. Y los gobiernos de
España con PP y PSOE han sido cómplices de esas tensiones. Este Gobierno
actual, apostando por la nación de naciones no sabe que ese último paso, esa
última frontera, conduce al enfrentamiento civil y el conflicto social.
5/. OKUPAS. Este es un país de chichinabo.
Ejemplo, la sanitaria Pilar Damián. Se desplaza para trabajar con motivo de la
pandemia y le ocupan la casa. Lleva semanas tratando de que le dejen su única
vivienda que ha sido ocupada por un tipo con dos coches, que ha instalado fibra
óptica y al que no se puede sacar de la casa a palos y hostias. La propietaria
se planteas contratar a una empresa de desalojo, que aprovechando las mismas
lagunas legales que permite a los ocupas robarte la vivienda y dejarte en la
calle con lo puesto puede hacerlo, pero cuestan caro. Una ley que permite esto
no es ley. País de chichinabo, acomplejados, corruptos y chorizos el que hemos
construido. Está ocurriendo en Vic. Los ocupas tardan 15 minutos en cambiar la
cerradura y desde ese momento tu vivienda pasa a ser de ellos. Entre tres meses
y dos años para desalojarlos. Algún caso hay de ocupación reciente de una
vivienda con piscina para pasar el verano y los propietarios, de alquiler. Y
los políticos de la Casta corrupta en sus batallitas, creando odio mientras
viven a cuerpo de rey. Si ocuparan mi casa los desalojo ilegalmente, a palos,
vivos o muertos, o me matan. Antes o después ocurrirá. Alguien hará la justicia
que la ley de chichinabo le niega. Serán responsables los políticos corruptos
que aprobaron esa ley brutalmente injusta, solo aplicable en una sociedad como
esta, de bueyes mansos. Las comunidades de vecinos debieran organizarse y ante
cada ocupación, como en Fuenteovejuna: “todos a una”. Unas hostias y a tomar
por culo los ocupas. Y nadie ha visto nada. Las leyes injustas no deben
cumplirse. Sino no habría democracia, ni libertad ni derechos. Si el 1 de
diciembre de 1955 la activista por los derechos civiles Rosa Park no se niega
en Alabama a ceder su asiento a un blanco y desplazarse a la parte trasera del
autobús (lo que le costó la cárcel), la llama del fin del apartheid no habría
comenzado.